La tercera generación fierrera de la familia empezó a dar sus primeros pasos en el automovilismo. Bruno Antelo, hijo de Mario y nieto de Osvaldo, condujo por primera vez un auto de la Fórmula Metropolitana en el autódromo de Olavarría.
Bruno, con pasado en el karting, giró en 60 oportunidades al trazado del Hermanos Emiliozzi con un Crespi del equipo de Gabriel Satorra y dejó una muy buena impresión.